Newburgh, New York: Una breve comparación con nuestra República del alma
Luego vemos el McDonal's, con su gran bandera americana que con orgullo anuncia es una empresa netamente norteamericana. Ahí entras y tienes que hacer una fila bien ordenada, nadie se te cruza delante, pides la comida y rápidamente te la sirven en una bandeja bien limpia, las papas en su embace, la hamburguesa envuelta en un papel especial para ello y el refresco te dan un baso para que te sirvas. Luego te sientas en una silla y mesa impecablemente limpias, los empleados son simpáticos y complacientes con el cliente. Nunca he visto una mosca en uno de estos establecimientos. En nuestro país entras a un lugar similar y para que te atiendan como Dios manda tienes que echar un pleito, la gente no hace la fila como Dios manda y pretenden que los atiendan primero, aunque llegaron de último. La comida te la sirven desordenadamente y los empleados te tratan como si fueras tú el empleado, no me quiero imaginar que pasaría si les dan un baso para que se sirvan el refresco.
Luego vemos la estación de gasolina Citgo, de capital venezolano, en varias ocasiones el presidente de ese país ha dicho que es enemigo de los Estados Unidos y que ese país es lo peor, esto para mí es el verdadero significado de la democracia, no quieren saber de Norteamérica, pero se les permite hacer negocios en nuestro territorio libremente. Luego pasamos a los precios de la gasolina en Estados Unidos, 3.19 dolares la regular, que son unos 127 pesos dominicanos. Uno mismo echa su gasolina y no se atreven a hacerte fraude. En nuestro país hay gente que quisieran comerse un haitiano diario. Los precios de los combustibles son los más caros de América y cuidado si del mundo, esta semana la gasolina regular en nuestro país cuesta 218 pesos. Las gasolineras casi nunca venden un galón completo, los fraudes en esa materia son muy evidentes y nadie hace nada por evitarlos.
Nuestro país es inmensamente bello, todavía hay gente buena y trabajadora, pero lamentablemente hemos caído muy bajo, al que consideran héroe es al más corrupto, los políticos mientras más ladrones son más populares. A los honestos los consideran pendejos, para poder vivir medianamente bien hay que robarse la energía eléctrica, sobornar para tener una buena atención en las oficinas públicas y corromperse igual que la mayoría, sino tienes que vivir como paria, aislado de todos. La gente critica a los que actúan de acuerdo a la ley y hasta los ridiculizan. La verdad que no sé donde vamos a parar, la cosa cada vez se pone peor y no se ve solución en un futuro cercano. Mi fe está puesta en Dios, ya que es obvio el hombre fracasó en nuestro bello y rico país, abandonado a su suerte y muy mal administrado. ¡Solo Dios nos salva!
¡¡¡LA VERDAD SIN INSULTOS!!!
(HRCV) Sharing is sexy
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