¡Adiós y gracias embajador Brewster! ¡Misión Cumplida!

Hoy al medio día cesan las funciones como embajador de los Estados Unidos de América del mejor embajador que ha tenido ese país en nuestro territorio, James Brewster, ya que, como hace la gente decente y que se respeta, renunció al cargo para que el presidente Trump nombre a su nuevo representante en el país, hasta eso nos enseñó el señor embajador.

Desde el primer instante que usted fue nominado al cargo empezó su misión de mostrarle al mundo lo que sufre un homosexual en estas caricaturas de países.  Desde aquel momento empezaron los insultos y las descalificaciones.  Ya aprobado por el Senado norteamericano llegó usted a este infierno de discriminaciones, corrupción y maledicencia.

A usted aquí se le dijo de todo por ser homosexual, nadie le señaló un acto indebido, pero le decían mariconcito, pájaro, hasta el cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez lo insultaba y discriminaba cada vez que le salía del forro, pero al embajador del Vaticano, que violó a decenas de niños dominicanos lo ayudaron a escapar del país, y el Cardenal, que lo insultaba a usted, dijo en televisión nacional que ese embajador era un hombre bueno apegado a la leyes.

El gobierno jugó una parte importante en que a usted se le desconsiderara, las bocinas pagas por el Estado eran los que más le insultaban y discriminaban, esos, que nunca han insultado a los corruptos del gobierno y al embajador violador del Vaticano, siempre estuvieron en primera fila para insultarle, pero usted siempre se mantuvo firme, con la frente en alto y demostró al mundo lo que puede sufrir un homosexual en un país dirigido por enanos mentales como la República Dominicana.

Usted, embajador Brewster, cumplió con su misión como un caballero, como un ser humano bueno, educado, inteligente y muy valiente.  Eso es muy difícil en un país donde los intelectuales políticos, en su gran mayoría, solo son inteligentes para robar y hacer ricos a familiares, amigos y allegados.  Aquí los críticos no perdonan que un homosexual sea exitoso, ellos creen que ser gay es un delito, prefieren defender narcotraficantes, ladrones, violadores, funcionarios e individuos que de días son "hombres" y de noche mujeres.

Me inclino reverente y respetuoso ante usted, señor embajador, por honesto, por respetuoso, eficiente, educado, por homosexual, por hombre, por buen funcionario de su gran país y por mostrar al mundo lo que puede pasar a un ser humano en un país atrasado por el simple hecho de ser diferente, por ser homosexual.

Adiós, gracias señor embajador y su pareja, Bob J. Satawake, quien también es poseedor de las mismas prendas morales que usted.  Ustedes terminan su misión en República Dominicana y nadie los puede señalar con un acto indebido.  Sé que ustedes estarán siempre por aquí, tienen casa en nuestro país desde hace muchos años y tienen muy buenos amigos en esta tierra bella, si un día pasan por Barahona mi casa está a su disposición, aquí tendrán una cama donde dormir, una mecedora donde sentarse, una mesa y alimentos para comer, y un amigo sincero que sabe apreciar a la gente por su conducta, por la forma en que vive y no se fija si es gay, rubio, negro, rico o pobre.  ¡Adiós y gracias señor embajador James Brewster! ¡Misión cumplida!
¡¡¡LA VERDAD SIN INSULTOS!!!
(HRCV)  Sharing is sexy