Alejandro Peña (Polocho)...

Señor  Héctor Rafelin Cuello
El Barahonero Blog Spot

New York, 10 de marzo 2014

Estimado señor:
Soy un fiel seguidor de su página digital y siempre agradezco su buena labor y trabajo desinteresado en mantener a los Barahoneros ausentes al tanto de lo que pasa en nuestra querida provincia, tengo que admitir que usted es un abanderado de los mejores intereses de nuestra querida Barahona porque sus hechos así lo demuestran.

El motivo de esta carta pública es traer a colación el tema que usted responsablemente denuncio y que ha sido bastante comentado en las redes sociales, la brutal golpiza que Keith Alexander Coiscou Ramirez le propinara a su compañera sentimental Lucki Ramirez, la conducta de este señor es sin lugar a dudas indefendible e injustificable y deben ser condenadas por toda aquellas personas que tengan razonamiento propio de lo bueno y lo malo, de eso no hay discusión.

Pero quiero llamar a su atención públicamente que sus cuestionamientos de que el señor Coiscou está siendo protegido por sus familiares no son del todo correctas, tengo el honor de conocer a esta noble familia que solo han sabido dar un excelente ejemplo de buen vivir ciudadano. Por lo que  su aseveración no se apega a la verdad. Si la familia hubiese querido proteger a este señor, Barahona no sería el lugar apropiado para hacerlo, una de sus hermanas vive en Canadá y otra vive en la región norte de nuestro país, sus padres viven Barahona y los hechos ocurrieron en Bani, sus padres no pueden controlar el que el visite Barahona y usted desconoce los esfuerzos realizados por ellos para solucionar esta embarazosa situación.

Para la familia Coiucou es suficiente vergüenza y dolor los hechos ocurridos donde su hijo es el protagonista,  le pido de manera pública que por favor cese la acusación del encubrimiento familiar de este horrendo hecho. El hecho de que un miembro de una familia emprenda una conducta despreciable como esta no hace automáticamente a todos cómplices.

Ni usted ni yo podemos negar la existencia de un  Dios todo poderoso como creador de todas las cosas pero de acuerdo a la biblia un ángel creado por Dios asumió una conducta totalmente contraria a las buenas costumbres y principios divinos y llego a ser satanás el diablo, este hecho de ninguna manera hace a Dios colaborador de la conducta de uno de sus hijos.

La conducta despreciable y abusadora de Keith Alexander Coiscou Ramirez que arrastra hacia el lodo el buen nombre de su familia jamás hace que ellos sean colaboradores de tan despreciable acción, por favor cese  sus infundadas alegaciones contra personas que nada tienen que ver con la conducta despreciable de uno de sus miembros.
Nadie puede elegir la familia que tiene.

Esperando que usted entienda mi punto de vista y actitud por los puntos antes expuestos la saluda respetuosamente,
Alejandro Peña

Mi respuesta:

Señor Luís Peña (Polocho):  Yo, en los años que llevo con esta pagina, nunca he tenido que retirar nada de lo que he dicho o publicado, si tienes alguna queja de algo que puedas probar en donde he actuado mal procede en consecuencia.

El que no dice, sabiendo,  donde está un delincuente como éste es cómplice, parece que tú no sabes mucho de leyes o te haces el idiota.  Si es cierto que vives en USA busca un abogado allá que te oriente para que no hables sin saber.

Si un hijo o hermano mío mata o agrede una persona y yo sé donde él se esconde y no lo denuncio soy cómplice por omisión.

Repito:  SI TU CREES QUE HE DICHO ALGO QUE OFENDE TU FAMILIA O QUE LA DENIGRA DE ALGUNA MANERA REÚNE LAS PRUEBAS Y ACTÚA EN CONSECUENCIA, QUE YO NO TENGO MIEDO Y RESPALDO CADA PALABRA ESCRITA EN MI MEDIO CON MI VIDA SI ES NECESARIO.

Esta comunicación tuya más que defender a la familia Coiscou me da la la impresión que lo que pretende es callarme en este horrible caso.  No pierdas tu tiempo, ya que esta muchacha no es hija del doctor Pérez, ni es huérfana.

Aquí la familia que está en desgracias no es la tuya, la de ella, que son más de 70 hermanos, es la agraviada, tu delincuente sigue haciendo lo que le gusta: golpear mujeres indefensas.

Pero que sepa ese delincuente que yo me involucré en esto y que va a caer tarde o temprano y pagará ante la justicia.  El mes que viene voy para New York, si quieres me das tu número de teléfono y cuando llegue allá nos reunimos y te digo esto de frente.

Finalmente, a mí no me manden cartas, díganle a su delincuente profesional que se entregue, y si ustedes creen que he violado alguna ley procedan en consecuencia y no jodan más.

Héctor Rafelín Cuello.
Barahona, R.D.-Davie, Florida, USA.
http://www.ElBarahonero.blogspot.com/