Karol Rafael Cuello: Un pelotero en construcción

By El Barahonero domingo, 2 de febrero de 2020 0 comments
Todo se inició cuando mi hermano mayor, Iván Cuello, envió a mi casa, desde La Florida, útiles deportivos para repartirlos a las ligas de béisbol de Barahona.  Cuando él llega empieza a clasificar los útiles, toma un bate pequeño, un guante y una bola de béisbol y se lo regala a Karol.

Iván me pregunta si Karol juego béisbol, si está en una liga, le digo que no, que aún estaba muy pequeño, él me pregunta su edad y le digo que tiene cinco años, a lo que me responde que esa es la mejor edad para iniciar.

Iván termina de clasificar los útiles he invita a Karol a que salgan a la marquesina para ver si sabía jugar, el niño nunca había tomado un bate en su mano, ya fuera Iván le dice a Karol que se cuadre para batear, él lo hizo de forma precaria, le picha y el niño le dio una línea que le pegó en el brazo marcándole la bola como si fuese un tatuaje, mi hermano me mira y me dice que lo lleve a inscribir en una liga inmediatamente, pues se vio que el niño tenía material.

Ese día en la tarde se lo llevé a mi buen amigo Picho Padilla, quien lo acogió y le enseñó los principios del béisbol, las bases, como atrapar, batear y correr.  A Karol le daba brega correr, ya que creía cuando lo mandaban a correr era un castigo, me costó convencerlo que para ser pelotero había que correr y mucho, con el tiempo se convenció y ahora no hay quien lo pare, es un atleta en toda la extensión de la palabra.

Pasó un año y Picho enfermó un par de veces y un día me dijo que se lo llevara a otra persona que pudiera dedicarle más tiempo, así lo hice.  Karol pasó por un par de manos y hoy en día está en la Liga Francis Santana (Piñeiro) quien trabaja duro para que él y otros jóvenes logren su sueño de llegar a las Grandes Ligas. 

Siento mucho orgullo por Karol, ya que veo el gran sacrificio que hace cada día para lograr su meta.  Al final sé que mi hijo es y será un hombre de bien, un atleta en toda la extensión de la palabra.  Yo nunca he pagado ni influenciado para que a mi hijo se le privilegie en el béisbol, todo lo contrario, siempre lo he inducido para que luche por las posiciones y para lograr sus metas, al contrario de lo que hacen otros.  ¡Dios te bendiga mi hijo amado!
¡¡¡LA VERDAD SIN INSULTOS!!!
(HRCV) Sharing is sexy

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