La diferencia entre dos Américas
Yolanda América María es hija del excelentisimo señor presidente de la República Dominicana, doctor Leonel Fernandez Reyna.
América Marsell es mi hija.
Yolanda América nació prematura y gracias a Dios, y a que nació en una de las mejores clínicas de la nación, atendida por los mejores especialistas, pudo sobrevivir.
América Marsell nació en el hospital Jaime Mota de Barahona hace cinco años y ocho meses, por poco se muere, la dejaron pasar de tiempo y no aparecía un doctor que le hiciera la cesaria a la mamá y las enfermeras la obligaban a que pujara una niña, que después que nació se supo que pesaba once libras y nueve onzas. Producto de esa mala practica, mi América, a sus casi seis años todavía no habla.
Yolanda América de seguro tiene a uno de los mejores pediatra del país como medico de cabecera.
América Marsell cuando se pone mala, le dan convulsiones producto del daño cerebral que le causaron cuando nació, tenemos que correr con ella a la emergencia del mismo hospital donde casi la matan, en dicho hospital la tratan bien, pero casi nunca hay medicinas y mucho menos la instrumentación adecuada para atenderla.
Yolanda América come los mejores alimentos del mercado.
América Marsell tiene que comer lo que aparezca, aunque su papi no toma alcohol, ni usa drogas y mucho menos gasta dinero buscando queridas en la calle, hay días que se le hace difícil conseguir la alimentación adecuada para la familia y tienen que conformarse con un pan con mantequilla, un locrio de pica-pica o un arroz blanco con huevo en revoltillo.
Yolanda América se alimenta con los mejores productos lácteos que se venden en el país.
América Marsell toma una leche barata que venden en el supermercado y que están diciendo que es suero para engordar cerdos.
Yolanda América cuando sale con su mamita lo hacen en la jipeta presidencial, placa número uno, con decenas de guarda-espaldas y franqueadores abriéndole el paso para que no tengan que sufrir la inclemencia del transito y para que no sean expuestas al crimen galopante que estamos sufriendo en el país.
América Marsell cuando sale con su querida madre lo hacen en moto-concho, con la obligada pregunta-¿doña, con aire o sin aire?- con la única protección del Dios Todopoderoso y a lo menos que se exponen es que aparezca un atracador que los tumbe del motor de una patada para robarselo, sin pensar que sobre dicha maquina van niños y personas inocentes, al ladrón lo único que le interesa es conseguir la próxima dosis de drogas para sentirse ¨BIEN¨.
Yolanda América, además de la protección divina, siempre está protegida por la guardia presidencial, veinticuatro horas al día, siete días de la semana.
América Marcel solo cuenta con la protección divina y la de su amado padre.
Yolanda América nunca tiene que despertar a media noche llorando por que se fue la energía eléctrica y el abanico se apagó, y los mosquitos la están molestando.
América Marsell se le va la electricidad todas las noches y se despierta dando gritos por que el calor no la deja dormir y los mosquitos se la están comiendo viva.
Yolanda María de seguro tiene un cuarto lleno de juguetes en donde se tranca a jugar.
América Marsell le encanta jugar en el patio y untarse de tierra de la cabeza a los pies.
Yolanda América cuando cumple años se lo celebran por todo lo alto, contratan a alguien para que le organice la fiesta y sus amiguitos le regalan innumerables y costosos regalos.
América Marsell le celebramos sus cumpleaños con una fiesta humilde, le compramos un biscochito, hacemos chicharrón de pollo, unos espaguetis y una cubeta de ponche de frutas. El papá de América Marsell le tiene prohibido a sus amiguitos que le lleven regalos en su cumpleaño, él dice que es un abuso poner a gente pobre ha comprar regalos cuando ni siquiera tienen que comer.
Yolanda América tiene un padre muy importante, él tiene el poder para reducir el crimen, las drogas y la corrupción en el país. Si él da una orden todos tienen que obedecerlo, no se sabe por que él no se ha puesto duro con tantos problemas que agobian el país.
América Marsell tiene un papá que vive denunciando las cosas malas, denuncia los vendedores de drogas, a los atracadores, y a los políticos corruptos y nadie le hace caso. El papá de América Marsell dice que él está luchando por que quiere un mejor país para sus hijos y los amiguitos de ellos. Si él tuviera poder como él papá de Yolanda América de seguro las cosas fueran diferente. Lo malo o lo bueno es que el papá de América Marsell no es político y él dice que reniega de los políticos, por que todos prometen y prometen y cuando llegan no hacen nada.
Con todas las diferencias que existen entre las dos Américas, hay puntos de coincidencia entre ambas, las dos son muy amadas y queridas por sus padres, familiares y amigos.
Aunque una viva en el cielo y la otra en una especie de infierno, las dos son ¨DOMINICANAS¨.
(HRCV)
¡¡¡LA VERDAD SIN INSULTOS!!!
Sharing is sexy
Previous Entries
Oscar
5:36 p. m., agosto 17, 2008
Como diria Alberto Cortez: Que verdad tan verdadera, pero yo agregaria, que dolorosa y cruel realidad.
Deseo hacer contacto con el autor de este mensaje, por favor
mi e mail es: oscarm898@msn.com
Para buscar soluciones juntos a problemas que nos afectan como padres y ciudadanos de Barahona.
Gracias
Oscar Matos
Al Nasiriyah, Irak
Anónimo
12:39 p. m., agosto 23, 2008
Es muy triste la realidad que usted describe. Parece increible que en una tierra tan maravillosa y fértil haya personas (y sobre todo niños) que pasen necesidades. Tampoco entiendo los cortes de agua y luz, molestia diaria a la que tienen que enfrentarse los barahoneros. Espero que entre todos consigamos mejorar la calidad de vida en esta maravillosa ciudad.